El Baskonia obvia la denuncia pública de Darius Adams

Algunas fuentes del club azulgrana apuntaron que aún no ha finalizado el plazo para satisfacer el último plazo del sueldo, cifrado en unos 10.000 euros, mientras otras aseguraban que ya está todo finiquitado en el contrato con Adams. El Baskonia transmite tranquilidad, sea como fuere, asegura estar al día y no tener deudas pendientes con el díscolo base estadounidense, que ya había utilizado con anterioridad las redes sociales para denunciar su situación laboral con la entidad alavesa. «Todavía no me han pagado», censuró a finales de julio, aunque entonces borró rápidamente aquel acusatorio tuit.

Y apareció Mike James

Ayer no paró. «Sois estúpidos si pensáis que no conozco mi contrato», dijo tras comprobar las primeras reacciones desde Vitoria. Y siguió: «No les gusta cuando dices la verdad». Sin intención de detenerse esta vez, animado, además, por su compatriota Mike James, excompañero en el conjunto azulgrana. «La verdad duele, hermano», le respondió el base del Panathinaikos. Como hacían en la cancha, ambos se entienden bien en las redes sociales para alborotar juntos el partido. Porque la última apostilla de Adams fue rescatar un mensaje del jugador de Portland, «sin descuentos en mis servicios», de aquel 28 de julio en el que empezó a denunciar públicamente el supuesto impago que el club desmiente.

Darius Adams, procedente del Nancy francés, militó la última temporada y media en el Baskonia, destacando, sobre todo, en su segunda campaña en Vitoria, donde fue pieza clave del equipo que alcanzó la Final Four y se convirtió en el máximo anotador de la Liga ACB (17,2) y quinto de la Euroliga (13,2). Un talentoso base de 27 años que, después de probarse en las ligas de verano de la NBA y declinar ofertas europeas, incluida la del propio Baskonia, sucumbió a la tentación económica del baloncesto chino, enrolándose en las filas de los Xinjiang Flying Tigers.