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Marinkovic.
Miedo escénico y decepción

Miedo escénico y decepción

Si el equipo no defiende, no corre; si lleva el partido al juego colectivo, se convierte en previsible

PEPE LASO

Domingo, 19 de febrero 2023, 08:17

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Al Baskonia le pudo en Badalona el famoso miedo escénico, los largos años de sequía del Joventut. Su historial plagado de éxitos, y un largo presente de penurias, siempre económicas que no deportivas, motivó al máximo a los verdinegros en el partido de cuartos. Llevaban demasiado tiempo sin atisbar la posibilidad de reverdecer un pasado brillante. Esta Copa le permite a la 'Penya' soñar, y en ello está. Para los vitorianos era una más, comparecían en tono bajo, aun sabiendo que el recorrido hacia el título era soleado, pero les ha faltado coraje. En algún momento parecían la cuadrilla del año pasado. En términos futbolísticos, los jugadores no metieron el pie y en cuanto el Joventut apretó las clavijas, se acabó el carbón.

El tercer cuarto, con ese parcial de 33-15, me confirma que el Baskonia donde se muestra poderoso es en su trabajo defensivo y que todo su talento anotador únicamente lo consigue desde brillantes acciones defensivas, las cuales le facilitan los momentos de acierto. Si el equipo no defiende, no corre; si lleva el partido al juego colectivo, se convierte en previsible y deja al descubierto sus debilidades, básicamente la física.

Al ocurrir el percance en competición de muerte súbita, lo normal es que el cuadro se recupere anímicamente. Nada de lo ocurrido, estoy seguro, ha sido una gran sorpresa para el entrenador. Sabe que, según va avanzando la campaña, las fuerzas se debilitan y la acumulación de partidos genera lesiones que dejan huella en la plantilla. Posiblemente, algún jugador saturado por el esfuerzo piense: «Ya vale, esto no hay quién lo aguante». Si fuera así, es el momento en que Peñarroya debe mostrar sus conocimientos sicológicos. Ha llegado el instante de mantener fresca la cabeza de los integrantes, pues han demostrado que sus cuerpos son muy capaces. Seguro que lo sabrá hacer. Los tres o cuatro partidos venideros nos dirán si la falta de energía en los cuartos de final ha sido producto de las circunstancias del evento o por el contrario los jugadores están ahora faltos de combustible.

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