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Seguidores azulgranas celebran en la grada del Buesa Arena uno de los triunfos del Baskonia esta temporada. Jesús Andrade
Prohibido fugarse de Alcatraz

Prohibido fugarse de Alcatraz

Candado en el Buesa ·

El Baskonia defiende ante el Mónaco el asombroso balance de veintiún triunfos y sólo tres derrotas como local este curso

Ángel Resa

Viernes, 10 de marzo 2023, 00:30

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Escapar con vida desde el punto deportivo del Fernando Buesa Arena debe de parecerse muchísimo a la célebre fuga de Alcatraz, la antigua prisión californiana de máxima seguridad que se divisa desde la hermosura urbana de San Francisco. Casi seis meses y medio después de que la temporada 2022-2023 izase el cortinaje hasta el techo, el Baskonia sólo ha perdido tres de sus veinticuatro encuentros al amparo de su público. Es el dato al que se enfrenta esta noche el Mónaco, que se escribe a vuelapluma y necesita de una digestión lenta para asimilarlo. Ya confesaba Joan Peñarroya la víspera de meter una tunda inclemente en el torneo continental al Valencia, su exequipo, que los jugadores azulgranas se sentían «mucho más cómodos» cuando la parroquia alavesa encendía la lumbre en el hogar. Pero un asunto es la constatación de este hecho basado en las sensaciones y otro, el formidable balance vitoriano como anfitrión.

Tres excepciones

Sólo Tenerife, Olympiacos y Barça han asaltado desde finales de septiembre la caja fuerte de Zurbano

Sólo el Maccabi en el ámbito de la Euroliga puede presumir de elaborar semejante cocina casera. Por cierto, adversario que el Baskonia visitará el jueves de la próxima semana para devolver la visita a un conjunto israelí que abandonó escaldado el recinto de Betoño en la primera vuelta. Una de esas noches celestiales que cantan salmos al grupo azulgrana por su manera de levitar sobre la cancha y abatir a cuantos adversarios, bastantes de indiscutible tronío, se le ponen por delante. Zurbano se alza a los ojos de los viajeros como un castillo de almenas altivas y puentes levantados para impedir las invasiones. Un caso único, por la contundencia de los números, en el deporte profesional de la canasta al más alto nivel en esta orilla del Atlántico.

Tres manchas

Así que el bloque del técnico catalán luce una camisa impoluta al andar por la casa propia. Apenas ensuciada por tres leves manchas dentro de una tela XXL. Caídas en la condición de local frente a tres oponentes que presentan credenciales más que suficientes para competir y ganar en cualquier cancha. Dentro de la competición doméstica sólo el Tenerife de Txus Vidorreta, experto en enredar con su pizarra al club alavés, asaltó la caja fuerte del Buesa Arena. La única derrota dentro del territorio de la ACB que data, además, del ya remoto 9 de octubre, fecha de la tercera jornada. Desde entonces, nueve muescas consecutivas sobre la barra del bar. Algo semejante cabe comentar en torno a la trayectoria europea del cuadro azulgrana. De aquí únicamente han regresado a sus lugares de origen con el deber resultadista cumplido el líder Olympiacos, mejor club hasta ahora de la fase regular, y el Barça, que se anotó un duelo ajustado el 19 de enero. Balances, por lo tanto, de 10-1 en el torneo español y de 11-2 en el que patrocinan las líneas aéreas turcas.

Photo finish

El equipo azulgrana ha resuelto a su favor las tres prórrogas en casa ante Betis, Partizan y Efes

El equipo vitoriano se siente tan fuerte en casa que piensa que nadie le puede tocar, parafraseando una letra de Bunbury. Y si aún le falta tocar con la cabeza el techo de cristal en ambas competiciones, no le queda lejos, es por sus caídas de tensión lejos de Betoño dentro de la muy exigente Euroliga, salvo gloriosas excepciones como la reciente en el WiZink Center. Al abrigo de su gente, el Baskonia se ha impuesto en muchas ocasiones por la táctica del aplastamiento tan contundente como hermoso. Y otras metiendo riñones mientras sentía el aliento del público. El potencial del Mónaco invita a explorar esta noche la segunda vía.

Los hechos convalidan, además, la entereza anímica del grupo que adiestra Peñarroya. Hasta en tres oportunidades ha debido de recurrir a las prórrogas para solventar sus citas en Zurbano y en todas con la resolución favorable de esas propinas. Despertó justo a tiempo para derrotar al Betis, rival en Sevilla el próximo domingo, tras 45 minutos. Y solventó los complicadísimos trámites ante Partizan y Efes, mediante una reacción monumental durante el último cuarto ante el cuadro turco, también en el tiempo añadido. ¿Más estadísticas irrefutables sobre la jerarquía local azulgrana? Pues las hay. Como las nueve ocasiones en las que roto la barrera baloncestística del sonido al rebasar el centenar de puntos. Aunque, cierto es, que con la ayuda suplementaria de las tres prórrogas ya mencionadas. En los aledaños del Buesa bien podría figurar el cartel 'Prohibido fugarse de Alcatraz'.

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